[:es]El blog de nuestro sitio WEB agradece la colaboración del Dr. Julián Pérez Peña, quien goza de gran popularidad en nuestro país por su espacio televisivo “La dosis exacta”, programa en el que este excelente médico logra trasmitir claros mensajes educativos, gracias a sus grandes dotes de comunicador.
ALIMENTOS Y MEDICAMENTOS
Existen interacciones entre medicamentos y alimentos que pueden producir efectos negativos en la seguridad y eficacia del tratamiento farmacológico y, también, en el estado nutricional del paciente.
Medicamentos con un margen terapéutico estrecho, es decir, cuya dosis terapéutica es próxima a la dosis tóxica, tales como warfarina, fenitoína, hipoglucemiantes orales, antihipertensivos, digoxina, contraceptivos orales o litio.
Medicamentos que tienen una curva dosis-efecto de gran pendiente, de forma que los cambios pequeños en la dosis producen grandes cambios en el efecto. Esto es muy importante en aquellas interacciones que reducen el efecto del fármaco.
Medicamentos que para ser eficaces deben mantener una concentración en sangre sostenida. Este es el caso, por ejemplo, de los antibióticos, cuya eficacia puede comprometerse si durante el tratamiento no se mantienen unos niveles plasmáticos constantes.
Alimentos que dificultan la absorción de un medicamento:
Las proteínas: interfieren en la absorción de la L-DOPA, el tratamiento de la enfermedad de Parkinson. Si un paciente con esta enfermedad detecta que la medicación no hace el efecto esperado, debe eliminar las proteínas en el desayuno, el almuerzo y la comida (carnes, pescados, huevos, lácteos y legumbres sobre todo), y consumirlas solo en la comida de la tarde.
Los lácteos: reducen la absorción y la eficacia de varios medicamentos. Entre ellos, los antibióticos (tetraciclinas) y las penicilinas orales. También dificultan la absorción de los suplementos de hierro, cuando se prescribe en el tratamiento de anemias o en el embarazo, y de los laxantes que contengan magnesio. Por ello se recomienda que deben pasar al menos 2 horas entre el consumo de uno y otro.
Bloquean la acción de un medicamento:
El té, por su alto contenido en taninos, impide la absorción de los suplementos de hierro.
Provocan efectos adversos al coincidir con algunos medicamentos:
El jugo de toronjas produce reacciones de toxicidad al mezclarse con bastantes medicamentos: algunos utilizados para tratar la hipertensión, fármacos antirrechazo de trasplantes, antihistamínicos e hipocolesterolemiantes.
En dependencia con el momento en que se ingieren los alimentos debe tenerse en cuenta lo siguiente:
En ayunas:
Debe tomarse el Sucralfato (o dos horas antes de las comidas). También el hierro (o dos horas antes y después de las comidas). Lo ideal es tomarlo antes de irse a dormir.
Acompañados de alimentos:
Los antiinflamatorios no esteroideos (AINES), porque producen irritación en el estómago.
Los antibióticos, cuyo suministro suele durar 7 días. Esa semana es aconsejable consumir abundante yogur con lactobacillus para recuperar la flora intestinal y vaginal, que nos protege ambos órganos. No obstante, es preciso espaciar la ingesta de yogur (lácteo) del momento en que se toma el antibiótico.[:]