[:es]¿Conoce que el tabaco es el principal factor de riesgo individual para la pérdida de voz? La disfonía, que es el término médico con el que se nombra este trastorno del timbre normal con el que hablamos, ya sea por afectación funcional u orgánica de la laringe, tiene disímiles causas que la propician; pero en el Día Mundial sin Tabaco le dedicamos un espacio al diálogo con nuestro especialista, Dr. Pedro Ignacio Venereo Capote (https://bit.ly/2W7JsXQ), quien nos ampliará.
A su consulta de Otorrinolaringología (https://bit.ly/311db8q) acuden muchos pacientes que refieren ronquera, voz temblorosa y/o intermitente, variaciones en la intensidad de la misma, frecuente pérdida de los tonos agudos o sensación de falta de aire al hablar. En algunas ocasiones describen efecto de carraspeo, noción de cuerpo extraño al tragar, tos, picazón, necesidad de aclarar la voz, y dolor leve o moderado de garganta. Considera el facultativo que todos estos estados frecuentemente son sintomatología propia de la disfonía, la cual tiene una prevalencia en el 47% de la población mundial, afectando a cualquier grupo etario, según explica.
Expone el Dr. Pedro Ignacio que las causas de la disfonía dependen en gran medida de la edad de los pacientes, pues en los niños más pequeños generalmente es debido a malformaciones congénitas o a alguna otra alteración más infrecuente; pero en edades más avanzadas suelen manifestarse alteraciones relacionadas con los nódulos laríngeos, mayoritariamente por hiperfunción vocal, muchas veces por abuso en los horarios de trabajo, ya sea por hablar mucho o muy alto. También los papilomas laríngeos, originados por una infección viral, son otra causante a considerar. Igualmente, la disfonía puede aparecer como un trastorno neurológico de la laringe, manifiesta a partir de una enfermedad sistémica neurológica o endocrino-metabólica.
Un aparte merecen los pacientes fumadores, quienes desarrollan la disfonía por lesiones inflamatorias en las cuerdas vocales o, alerta el facultativo, esta puede ser la presentación de un cáncer de laringe, muy común entre personas con adicción al tabaco.
Ante la pregunta de si la disfonía es siempre signo de enfermedad maligna, Venereo Capote responde negativamente, aclarando que puede tratarse de enfermedades benignas como son los nódulos de cuerdas vocales y los pólipos, o el curso de una laringitis aguda. El criterio de que se trate o no de una enfermedad maligna, explica el médico, dependerá de los factores de riesgo del paciente, como por ejemplo: edad, antecedentes de salud, hábitos tóxicos, entre otros. Sí reitera que ser fumador es lo más riesgoso, y que entre otras señales de riesgo a considerar se encuentra la exposición a irritantes externos como detergentes, polvo, gases y productos químicos; o a irritantes internos como el reflujo gastroesofágico o los estados alérgicos.
Entre otros elementos nada desdeñables para provocar la disfonía están el ruido de fondo, la mala acústica del ambiente, la calidad deficiente del aire, la humedad excesiva, los malos hábitos posturales en el trabajo, situaciones de estrés, el alcoholismo, procesos otorrinolaringológicos crónicos, deficiencia del control audiofonatorio por hipoacusia, técnica vocal defectuosa y antecedentes pulmonares.
Luego de este intercambio con el Dr. Pedro Ignacio Venereo, la recomendación es que se acuda a los especialistas en Otorrinolaringología o en Logopedia y Foniatría. Solo ellos, mediante la exploración de la laringe con un examen físico que se realiza con equipos especializados, podrán establecer un diagnóstico certero, según asevera nuestro Doctor.
El tratamiento posterior dependerá de la causa que haya provocado el padecer. Afortunadamente, reposo vocal, uso de antiinflamatorios y rehabilitación foniátrica, soluciona muchas veces el problema; pero en otras, se impone el tratamiento quirúrgico, usualmente microcirugía, dirigido a quitar la lesión totalmente o tomar una muestra para realizar una biopsia y decidir con posterioridad la conducta a seguir.
Recuerde que estilos de vida sanos le posibilitarán vivir más y mejor. Actúe con responsabilidad para que se pueda dejar escuchar.[:]