[:es]Desde hace más de veinte años, los especialistas en Medicina Intensiva y Emergencias de la Clínica Central Cira García realizan evacuaciones sanitarias o acompañamiento médico de pacientes a cualquier lugar del mundo. Desde zonas cercanas como el Caribe o Norteamérica: Bahamas, Haití, México, EEUU, Canadá, por citar algunos ejemplos; hasta lejanos países de Europa, Asia, África y Oceanía: España, Rusia, Alemania, Turquía, Japón, India, Australia, Nueva Zelandia, Angola, Sudáfrica, entre otros. Con la premisa de devolver al paciente a su lugar de origen, una vez que ha ido rebasando el estado crítico en el que se reciben los casos en la Unidad de Cuidados Progresivos del Centro, y siempre que ya cumpla el criterio de transportabilidad, es decir, que su condición de salud le permita resistir el viaje; se activan las coordinaciones pertinentes entre la Clínica, ASISTUR con sus compañías aseguradoras, los consulados, las aerolíneas y el centro médico que en el lugar de destino recibirá al paciente para continuar tratamiento. Engranado todo el mecanismo, queda lista la evacuación sanitaria, pero la experiencia de nuestros expertos les hace resaltar tres aspectos que consideran les han sido claves para lograr exitosas evacuaciones. Hoy desean compartir sobre eficacia, seguridad y confianza. Eficacia: Realizar la evacuación sanitaria con el personal adecuado, ya sea un médico o un enfermero,  o ambos integrados como equipo si el caso lo requiriese.  El traslado se podrá hacer en un vuelo comercial, siempre que el paciente se encuentre en  condiciones, pero será responsabilidad del acompañamiento especializado el minimizar riesgos, a pesar de la distancia a recorrer en el viaje, valorando en todo momento el adecuado costo-beneficio para el paciente. Seguridad: Portar durante el traslado los equipos y medicamentos que pudieran ser necesarios para la atención del paciente durante el vuelo, garantizando así la estabilidad de los parámetros vitales y que arribe en una forma adecuada a su destino final. Confianza: Lograr que los pacientes sientan confianza en el personal especializado que los acompaña. Los criterios que ofrecen los pacientes cuando son escoltados por el propio personal que les atendió durante la etapa crítica, son muy positivos, pues refieren que a la profesionalidad y humanismo, se le une el hecho de que este personal posee un mayor conocimiento del proceso de su enfermedad. Es importante aclarar que cuando los pacientes no tienen un seguro médico que respalde la evacuación, también se puede materializar la misma, si él o sus familiares asumen los costos. La Clínica es consciente que más allá del esmero que médicos y enfermeros intensivistas pongan en su trabajo, nada como “estar en casa” contribuirá al restablecimiento total de la salud.[:]

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